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Jeremías 20:1-11 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

1. Y el sacerdote Pasur hijo de Imer, que presidía como príncipe en la casa de Jehová, oyó a Jeremías que profetizaba estas palabras.

2. Y Pasur hizo azotar al profeta Jeremías y le puso en el cepo que estaba en la puerta superior de Benjamín, la cual conducía a la casa de Jehová.

3. Y sucedió que al día siguiente Pasur sacó a Jeremías del cepo. Le dijo entonces Jeremías: Jehová no ha llamado tu nombre Pasur, sino Magor-misabib.

4. Porque así ha dicho Jehová: He aquí, yo haré que tú seas un terror para ti mismo y para todos los que bien te quieren; y caerán por la espada de sus enemigos, y tus ojos lo verán; y a todo Judá entregaré en manos del rey de Babilonia, y él los llevará cautivos a Babilonia y los matará a espada.

5. Entregaré asimismo toda la riqueza de esta ciudad, y todo su trabajo y todas sus cosas preciosas; y entregaré todos los tesoros de los reyes de Judá en manos de sus enemigos, y los saquearán, y los tomarán y los llevarán a Babilonia.

6. Y tú, Pasur, y todos los moradores de tu casa iréis cautivos; y entrarás en Babilonia, y allí morirás y allí serás enterrado, tú y todos los que bien te quieren, a los cuales has profetizado con mentira.

7. Me persuadiste, oh Jehová, y fui persuadido; más fuerte fuiste tú que yo, y prevaleciste; cada día he sido escarnecido; todos se burlan de mí.

8. Porque cada vez que hablo, doy voces; grito: ¡Violencia y destrucción!, porque la palabra de Jehová me ha sido para afrenta y escarnio cada día.

9. Y dije: No me acordaré más de él ni hablaré más en su nombre; pero fue en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; me esforcé por contenerlo, pero no pude.

10. Porque oí las difamaciones de muchos: ¡Terror por todas partes! ¡Denunciadle, denunciémosle! Todos mis amigos miraban si claudicaría. Quizá se persuada, decían, y prevaleceremos contra él y tomaremos de él venganza.

11. Mas Jehová está conmigo como uno poderoso y temible; por tanto, los que me persiguen tropezarán y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetuo oprobio que jamás será olvidado.

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