Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Isaías 50:2 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

¿Por qué cuando vine no apareció nadie y cuando llamé nadie respondió? ¿Acaso se ha acortado mi mano para no redimir? ¿No hay en mí poder para librar? He aquí que con mi reprensión hago secar el mar; convierto los ríos en desierto; sus peces hieden y mueren de sed por falta de agua.

Leer capítulo completo Isaías 50

Ver Isaías 50:2 en contexto