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Isaías 2:9-22 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

9. Y se ha inclinado el hombre, y el varón se ha humillado; por tanto, no los perdones.

10. Métete en la peña y escóndete en el polvo de la presencia terrible de Jehová y de la gloria de su majestad.

11. La altivez de la mirada del hombre será abatida, y la soberbia de los hombres será humillada; y sólo Jehová será exaltado en aquel día.

12. Porque el día de Jehová de los ejércitos vendrá sobre todo soberbio y altivo, y sobre todo el que se haya ensalzado, y será abatido;

13. y sobre todos los cedros del Líbano altos y erguidos, y sobre todas las encinas de Basán;

14. y sobre todos los montes altos y sobre todos los collados elevados;

15. y sobre toda torre alta y sobre todo muro fortificado;

16. y sobre todas las naves de Tarsis, y sobre todas las pinturas preciadas.

17. Y la altivez del hombre será abatida, y la soberbia de los hombres será humillada; y sólo Jehová será exaltado en aquel día.

18. Y quitará totalmente los ídolos.

19. Y se meterán en las cavernas de las peñas y en las aberturas de la tierra, por la presencia temible de Jehová y por la gloria de su majestad, cuando él se levante para hacer temblar la tierra.

20. Aquel día arrojará el hombre a los topos y a los murciélagos sus ídolos de plata y sus ídolos de oro, que le hicieron para que adorase,

21. para meterse en las hendiduras de las rocas y en las cavernas de las peñas, por la presencia temible de Jehová y por la gloria de su majestad, cuando se levante para hacer temblar la tierra.

22. Dejaos del hombre cuyo aliento está en su nariz, pues, ¿de qué es él estimado?

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