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Génesis 27:21-31 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

21. E Isaac dijo a Jacob: Acércate ahora y te palparé, hijo mío, para ver si eres mi hijo Esaú o no.

22. Y se acercó Jacob a su padre Isaac; y él le palpó y dijo: La voz es la voz de Jacob, pero las manos, las manos de Esaú.

23. Y no le reconoció, porque sus manos eran velludas como las manos de Esaú; y le bendijo.

24. Y dijo: ¿Eres tú mi hijo Esaú? Y él respondió: Yo soy.

25. Y dijo: Acércamela, y comeré de la caza de mi hijo, para que te bendiga mi alma; y él se la acercó, y comió; y le trajo también vino, y bebió.

26. Y le dijo Isaac, su padre: Acércate ahora y bésame, hijo mío.

27. Y él se acercó, y le besó; y olió Isaac el olor de sus vestidos, y le bendijo y dijo:Mira, el olor de mi hijo escomo el olor del campo que Jehová ha bendecido.

28. Dios, pues, te dé del rocío del cielo, y de las grosuras de la tierra y abundancia de trigo y de mosto.

29. Sírvante pueblos, y naciones se inclinen ante ti; sé señor de tus hermanos, e inclínense ante ti los hijos de tu madre. Malditos los que te maldijeren, y benditos los que te bendijeren.

30. Y aconteció, luego que hubo Isaac acabado de bendecir a Jacob, y apenas había salido Jacob de delante de su padre Isaac, que Esaú, su hermano, regresó de cazar.

31. E hizo él también guisados, y trajo a su padre y le dijo: Levántese mi padre y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga tu alma.

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