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Génesis 24:30-37 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

30. Y aconteció que cuando vio el pendiente y los brazaletes en las manos de su hermana, que decía: Así me habló aquel hombre, fue a él; y he aquí que estaba con los camellos, junto a la fuente.

31. Y le dijo: Ven, bendito de Jehová, ¿por qué estás fuera? Yo he preparado la casa y el lugar para los camellos.

32. Entonces el hombre entró en la casa, y Labán desató los camellos; y les dio paja y forraje, y agua para lavar los pies de él y los pies de los hombres que con él venían.

33. Y le pusieron delante que comer; mas él dijo: No comeré hasta que haya dicho mi mensaje. Y Labán le dijo: Habla.

34. Entonces dijo: Yo soy criado de Abraham.

35. Y Jehová ha bendecido mucho a mi amo, y él se ha engrandecido; y le ha dado ovejas y vacas, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos.

36. Y Sara, esposa de mi amo, dio a luz en su vejez un hijo a mi señor, quien le ha dado a él todo cuanto tiene.

37. Y mi amo me hizo jurar, diciendo: No tomarás una mujer para mi hijo de entre las hijas de los cananeos, en cuya tierra habito,

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