11. Y así habréis de comerlo: ceñidos vuestros lomos, calzados vuestros pies y vuestro báculo en la mano; y lo comeréis apresuradamente. Es la Pascua de Jehová.
12. Pues yo pasaré esa noche por la tierra de Egipto y heriré de muerte a todo primogénito en la tierra de Egipto, tanto de los hombres como de las bestias; y ejecutaré mis juicios contra todos los dioses de Egipto. Yo Jehová.
13. Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.
14. Y habréis de conmemorar este día, y lo celebraréis como fiesta solemne a Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.