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Esdras 8:28-36 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

28. Y les dije: Vosotros estáis consagrados a Jehová, y son sagrados los utensilios; y la plata y el oro son ofrenda voluntaria a Jehová, Dios de nuestros padres.

29. Velad y guardadlos hasta que los peséis delante de los principales de los sacerdotes, y de los levitas y de los jefes de las casas paternas de Israel en Jerusalén, en las habitaciones de la casa de Jehová.

30. Y los sacerdotes y los levitas recibieron la plata, y el oro y los utensilios que fueron pesados, para llevarlos a Jerusalén a la casa de nuestro Dios.

31. Y partimos del río Ahava el doce del primer mes para ir a Jerusalén; y la mano de nuestro Dios estaba sobre nosotros y él nos libró de manos del enemigo y de las emboscadas en el camino.

32. Y llegamos a Jerusalén y reposamos allí tres días.

33. Y al cuarto día fue pesada la plata, y el oro y los utensilios, en la casa de nuestro Dios, por mano de Meremot hijo de Urías, el sacerdote, y con él Eleazar hijo de Finees; y con ellos estaban los levitas Jozabad hijo de Jesúa y Noadías hijo de Binúi.

34. Todo fue contado y pesado, y el peso total fue anotado en aquel tiempo.

35. Los hijos de los que habían sido llevados cautivos y que habían regresado de la cautividad ofrecieron holocaustos al Dios de Israel: doce novillos por todo Israel, noventa y seis carneros, setenta y siete corderos, doce machos cabríos como ofrenda por el pecado, todo en holocausto a Jehová.

36. Y se entregaron los decretos del rey a los sátrapas del rey y a los gobernadores del otro lado del Río, los cuales ayudaron al pueblo y a la casa de Dios.

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