7. Y lo vi llegar junto al carnero, y se enfureció contra él, y lo hirió y le quebró sus dos cuernos, porque el carnero no tenía fuerzas para mantenerse delante de él; lo derribó, por tanto, en tierra y lo pisoteó; y no hubo quien librase al carnero de su poder.
8. Y se engrandeció en gran manera el macho cabrío; y estando en su mayor fuerza, aquel gran cuerno fue quebrado, y en su lugar salieron otros cuatro cuernos notables hacia los cuatro vientos del cielo.
9. Y de uno de ellos salió un cuerno pequeño que creció mucho hacia el sur, y hacia el oriente y hacia la tierra deseable.