8. Y se enojó Abner en gran manera por las palabras de Is-boset, y dijo: ¿Soy yo cabeza de perro con respecto de Judá? Yo he hecho hoy misericordia con la casa de Saúl, tu padre, con sus hermanos y con sus amigos, y no te he entregado en manos de David. ¿Y tú me acusas hoy de haber pecado con esta mujer?
9. Así haga Dios a Abner y aun le añada, si no hago yo con David como Jehová le ha jurado,
10. trasladando el reino de la casa de Saúl, y confirmando el trono de David sobre Israel y sobre Judá, desde Dan hasta Beerseba.
11. Y él no pudo responder palabra a Abner, porque le temía.
12. Y envió Abner mensajeros a David de su parte, diciendo: ¿De quién es la tierra? Y que le dijesen: Haz pacto conmigo, y he aquí que mi mano estará contigo para hacer volver a ti a todo Israel.
13. Y David dijo: Bien; yo haré pacto contigo, pero una cosa te pido: No me vengas a ver sin que primero traigas a Mical, la hija de Saúl, cuando vengas a verme.
14. Después de esto envió David mensajeros a Is-boset hijo de Saúl, diciendo: Dame a mi esposa Mical, la cual yo desposé por cien prepucios de filisteos.
15. Entonces Is-boset envió y se la quitó a su marido Paltiel hijo de Lais.
16. Y su marido fue con ella, siguiéndola y llorando hasta Bahurim. Y le dijo Abner: Anda, vuélvete. Entonces él se volvió.
17. Y habló Abner con los ancianos de Israel, diciendo: Hace ya tiempo que procurabais que David fuese rey sobre vosotros.
18. Ahora, pues, hacedlo, porque Jehová ha hablado a David, diciendo: Por mano de mi siervo David libraré a mi pueblo Israel de manos de los filisteos y de manos de todos sus enemigos.
19. Y habló también Abner a los de Benjamín; y fue también Abner a Hebrón a decir a David todo lo que parecía bien a los de Israel y a toda la casa de Benjamín.
20. Vino, pues, Abner a David en Hebrón, y con él veinte hombres; y David hizo banquete a Abner y a los que con él habían venido.
21. Y dijo Abner a David: Yo me levantaré, e iré y reuniré a todo Israel junto a mi señor el rey, para que hagan pacto contigo y tú reines como lo desea tu corazón. David despidió luego a Abner, y éste se fue en paz.
22. Y he aquí que los siervos de David y Joab venían de una incursión, y traían consigo gran botín. Pero Abner no estaba con David en Hebrón, porque ya lo había despedido, y él se había ido en paz.