Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Reyes 10:8-18 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

8. Y llegó un mensajero que le dio las nuevas, diciendo: Han traído las cabezas de los hijos del rey. Y él le dijo: Ponedlas en dos montones a la entrada de la puerta hasta la mañana.

9. Y sucedió que por la mañana salió Jehú y, estando de pie, dijo a todo el pueblo: Vosotros sois justos. He aquí, yo he conspirado contra mi señor y lo he matado; mas, ¿quién ha matado a todos éstos?

10. Sabed ahora que de la palabra de Jehová que habló sobre la casa de Acab nada caerá en tierra, y que Jehová ha hecho lo que dijo por medio de su siervo Elías.

11. Así mató Jehú a todos los que habían quedado de la casa de Acab en Jezreel, y a todos sus príncipes, y a todos sus familiares y a sus sacerdotes, hasta que no quedó ninguno.

12. Y se levantó de allí y fue a Samaria, y en el camino llegó a una casa de esquileo, de pastores.

13. Halló allí a los hermanos de Ocozías, rey de Judá, y les dijo: ¿Quiénes sois vosotros? Y ellos dijeron: Somos hermanos de Ocozías, y hemos venido a saludar a los hijos del rey y a los hijos de la reina.

14. Entonces él dijo: Prendedlos vivos. Y después que los tomaron vivos, los degollaron junto al pozo de la casa de esquileo, cuarenta y dos hombres, sin dejar ninguno de ellos.

15. Cuando partió de allí, se encontró con Jonadab hijo de Recab, que venía a él; y después de saludarlo, le dijo: ¿Es recto tu corazón, como el mío lo es con el tuyo? Y Jonadab dijo: Lo es. Pues si lo es, dame la mano. Y él le dio su mano, y lo hizo subir consigo en el carro.

16. Y le dijo: Ven conmigo y verás mi celo por Jehová. Y lo hicieron subir en su carro.

17. Y cuando Jehú hubo llegado a Samaria, mató a todos los que habían quedado de Acab en Samaria, hasta exterminarlos, conforme a la palabra de Jehová que había hablado por medio de Elías.

18. Y reunió Jehú a todo el pueblo y les dijo: Acab sirvió poco a Baal, pero Jehú lo servirá mucho.

Leer capítulo completo 2 Reyes 10