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Romanos 3:1-13 Nueva Versión Internacional (NVI)

1. Entonces, ¿qué se gana con ser judío, o qué valor tiene la circuncisión?

2. Mucho, desde cualquier punto de vista. En primer lugar, a los judíos se les confiaron las palabras mismas de Dios.

3. Pero entonces, si a algunos les faltó la fe, ¿acaso su falta de fe anula la fidelidad de Dios?

4. ¡De ninguna manera! Dios es siempre veraz, aunque el hombre sea mentiroso. Así está escrito:«Por eso, eres justo en tu sentencia,y triunfarás cuando te juzguen.»

5. Pero si nuestra injusticia pone de relieve la justicia de Dios, ¿qué diremos? ¿Que Dios es injusto al descargar sobre nosotros su ira? (Hablo en términos humanos.)

6. ¡De ninguna manera! Si así fuera, ¿cómo podría Dios juzgar al mundo?

7. Alguien podría objetar: «Si mi mentira destaca la verdad de Dios y así aumenta su gloria, ¿por qué todavía se me juzga como pecador?

8. ¿Por qué no decir: Hagamos lo malo para que venga lo bueno?» Así nos calumnian algunos, asegurando que eso es lo que enseñamos. ¡Pero bien merecida se tienen la condenación!

9. ¿A qué conclusión llegamos? ¿Acaso los judíos somos mejores? ¡De ninguna manera! Ya hemos demostrado que tanto los judíos como los gentiles están bajo el pecado.

10. Así está escrito:«No hay un solo justo, ni siquiera uno;

11. no hay nadie que entienda,nadie que busque a Dios.

12. Todos se han descarriado,a una se han corrompido.No hay nadie que haga lo bueno;¡no hay uno solo!»

13. «Su garganta es un sepulcro abierto;con su lengua profieren engaños.»«¡Veneno de víbora hay en sus labios!»

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