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Mateo 8:19-25 Nueva Versión Internacional (NVI)

19. Se le acercó un maestro de la ley y le dijo:—Maestro, te seguiré a dondequiera que vayas.

20. —Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza.

21. Otro discípulo le pidió:—Señor, primero déjame ir a enterrar a mi padre.

22. —Sígueme —le replicó Jesús—, y deja que los muertos entierren a sus muertos.

23. Luego subió a la barca y sus discípulos lo siguieron.

24. De repente, se levantó en el lago una tormenta tan fuerte que las olas inundaban la barca. Pero Jesús estaba dormido.

25. Los discípulos fueron a despertarlo.—¡Señor —gritaron—, sálvanos, que nos vamos a ahogar!

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