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Mateo 26:5-19 Nueva Versión Internacional (NVI)

5. «Pero no durante la fiesta —decían—, no sea que se amotine el pueblo.»

6. Estando Jesús en Betania, en casa de Simón llamado el Leproso,

7. se acercó una mujer con un frasco de alabastro lleno de un perfume muy caro, y lo derramó sobre la cabeza de Jesús mientras él estaba sentado a la mesa.

8. Al ver esto, los discípulos se indignaron.—¿Para qué este desperdicio? —dijeron—.

9. Podía haberse vendido este perfume por mucho dinero para darlo a los pobres.

10. Consciente de ello, Jesús les dijo:—¿Por qué molestan a esta mujer? Ella ha hecho una obra hermosa conmigo.

11. A los pobres siempre los tendrán con ustedes, pero a mí no me van a tener siempre.

12. Al derramar ella este perfume sobre mi cuerpo, lo hizo a fin de prepararme para la sepultura.

13. Les aseguro que en cualquier parte del mundo donde se predique este evangelio, se contará también, en memoria de esta mujer, lo que ella hizo.

14. Uno de los doce, el que se llamaba Judas Iscariote, fue a ver a los jefes de los sacerdotes.

15. —¿Cuánto me dan, y yo les entrego a Jesús? —les propuso.Decidieron pagarle treinta monedas de plata.

16. Y desde entonces Judas buscaba una oportunidad para entregarlo.

17. El primer día de la fiesta de los Panes sin levadura, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:—¿Dónde quieres que hagamos los preparativos para que comas la Pascua?

18. Él les respondió que fueran a la ciudad, a la casa de cierto hombre, y le dijeran: «El Maestro dice: “Mi tiempo está cerca. Voy a celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos.”»

19. Los discípulos hicieron entonces como Jesús les había mandado, y prepararon la Pascua.

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