Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Mateo 12:6-19 Nueva Versión Internacional (NVI)

6. Pues yo les digo que aquí está uno más grande que el templo.

7. Si ustedes supieran lo que significa: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios”, no condenarían a los que no son culpables.

8. Sepan que el Hijo del hombre es Señor del sábado.

9. Pasando de allí, entró en la sinagoga,

10. donde había un hombre que tenía una mano paralizada. Como buscaban un motivo para acusar a Jesús, le preguntaron:—¿Está permitido sanar en sábado?

11. Él les contestó:—Si alguno de ustedes tiene una oveja y en sábado se le cae en un hoyo, ¿no la agarra y la saca?

12. ¡Cuánto más vale un hombre que una oveja! Por lo tanto, está permitido hacer el bien en sábado.

13. Entonces le dijo al hombre:—Extiende la mano.Así que la extendió y le quedó restablecida, tan sana como la otra.

14. Pero los fariseos salieron y tramaban cómo matar a Jesús.

15. Consciente de esto, Jesús se retiró de aquel lugar. Muchos lo siguieron, y él sanó a todos los enfermos,

16. pero les ordenó que no dijeran quién era él.

17. Esto fue para que se cumpliera lo dicho por el profeta Isaías:

18. «Éste es mi siervo, a quien he escogido,mi amado, en quien estoy muy complacido;sobre él pondré mi Espíritu,y proclamará justicia a las naciones.

19. No disputará ni gritará;nadie oirá su voz en las calles.

Leer capítulo completo Mateo 12