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Mateo 12:36-46 Nueva Versión Internacional (NVI)

36. Pero yo les digo que en el día del juicio todos tendrán que dar cuenta de toda palabra ociosa que hayan pronunciado.

37. Porque por tus palabras se te absolverá, y por tus palabras se te condenará.»

38. Algunos de los fariseos y de los maestros de la ley le dijeron:—Maestro, queremos ver alguna señal milagrosa de parte tuya.

39. Jesús les contestó:—¡Esta generación malvada y adúltera pide una señal milagrosa! Pero no se le dará más señal que la del profeta Jonás.

40. Porque así como tres días y tres noches estuvo Jonás en el vientre de un gran pez, también tres días y tres noches estará el Hijo del hombre en las entrañas de la tierra.

41. Los habitantes de Nínive se levantarán en el juicio contra esta generación y la condenarán; porque ellos se arrepintieron al escuchar la predicación de Jonás, y aquí tienen ustedes a uno más grande que Jonás.

42. La reina del Sur se levantará en el día del juicio y condenará a esta generación; porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí tienen ustedes a uno más grande que Salomón.

43. »Cuando un espíritu maligno sale de una persona, va por lugares áridos, buscando descanso sin encontrarlo.

44. Entonces dice: “Volveré a la casa de donde salí.” Cuando llega, la encuentra desocupada, barrida y arreglada.

45. Luego va y trae a otros siete espíritus más malvados que él, y entran a vivir allí. Así que el estado postrero de aquella persona resulta peor que el primero. Así le pasará también a esta generación malvada.

46. Mientras Jesús le hablaba a la multitud, se presentaron su madre y sus hermanos. Se quedaron afuera, y deseaban hablar con él.

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