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Lucas 23:38-45 Nueva Versión Internacional (NVI)

38. Resulta que había sobre él un letrero, que decía: «Éste es el Rey de los judíos.»

39. Uno de los criminales allí colgados empezó a insultarlo:—¿No eres tú el Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a nosotros!

40. Pero el otro criminal lo reprendió:—¿Ni siquiera temor de Dios tienes, aunque sufres la misma condena?

41. En nuestro caso, el castigo es justo, pues sufrimos lo que merecen nuestros delitos; éste, en cambio, no ha hecho nada malo.

42. Luego dijo:—Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.

43. —Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso —le contestó Jesús.

44. Desde el mediodía y hasta la media tarde toda la tierra quedó sumida en la oscuridad,

45. pues el sol se ocultó. Y la cortina del santuario del templo se rasgó en dos.

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