15. Así que fue y consiguió empleo con un ciudadano de aquel país, quien lo mandó a sus campos a cuidar cerdos.
16. Tanta hambre tenía que hubiera querido llenarse el estómago con la comida que daban a los cerdos, pero aun así nadie le daba nada.
17. Por fin recapacitó y se dijo: “¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen comida de sobra, y yo aquí me muero de hambre!
18. Tengo que volver a mi padre y decirle: Papá, he pecado contra el cielo y contra ti.
19. Ya no merezco que se me llame tu hijo; trátame como si fuera uno de tus jornaleros.”
20. Así que emprendió el viaje y se fue a su padre.»Todavía estaba lejos cuando su padre lo vio y se compadeció de él; salió corriendo a su encuentro, lo abrazó y lo besó.