Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Lucas 13:20-30 Nueva Versión Internacional (NVI)

20. Volvió a decir:—¿Con qué voy a comparar el reino de Dios?

21. Es como la levadura que una mujer tomó y mezcló con una gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa.

22. Continuando su viaje a Jerusalén, Jesús enseñaba en los pueblos y aldeas por donde pasaba.

23. —Señor, ¿son pocos los que van a salvarse? —le preguntó uno.

24. —Esfuércense por entrar por la puerta estrecha —contestó—, porque les digo que muchos tratarán de entrar y no podrán.

25. Tan pronto como el dueño de la casa se haya levantado a cerrar la puerta, ustedes desde afuera se pondrán a golpear la puerta, diciendo: “Señor, ábrenos.” Pero él les contestará: “No sé quiénes son ustedes.”

26. Entonces dirán: “Comimos y bebimos contigo, y tú enseñaste en nuestras plazas.”

27. Pero él les contestará: “Les repito que no sé quiénes son ustedes. ¡Apártense de mí, todos ustedes hacedores de injusticia!”

28. »Allí habrá llanto y rechinar de dientes cuando vean en el reino de Dios a Abraham, Isaac, Jacob y a todos los profetas, mientras a ustedes los echan fuera.

29. Habrá quienes lleguen del oriente y del occidente, del norte y del sur, para sentarse al banquete en el reino de Dios.

30. En efecto, hay últimos que serán primeros, y primeros que serán últimos.

Leer capítulo completo Lucas 13