Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Lucas 11:9-26 Nueva Versión Internacional (NVI)

9. »Así que yo les digo: Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá la puerta.

10. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre.

11. »¿Quién de ustedes que sea padre, si su hijo le pide un pescado, le dará en cambio una serpiente?

12. ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?

13. Pues si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!

14. En otra ocasión Jesús expulsaba de un hombre a un demonio que lo había dejado mudo. Cuando salió el demonio, el mudo habló, y la gente se quedó asombrada.

15. Pero algunos dijeron: «Éste expulsa a los demonios por medio de Beelzebú, príncipe de los demonios.»

16. Otros, para ponerlo a prueba, le pedían una señal del cielo.

17. Como él conocía sus pensamientos, les dijo: «Todo reino dividido contra sí mismo quedará asolado, y una casa dividida contra sí misma se derrumbará.

18. Por tanto, si Satanás está dividido contra sí mismo, ¿cómo puede mantenerse en pie su reino? Lo pregunto porque ustedes dicen que yo expulso a los demonios por medio de Beelzebú.

19. Ahora bien, si yo expulso a los demonios por medio de Beelzebú, ¿los seguidores de ustedes por medio de quién los expulsan? Por eso ellos mismos los juzgarán a ustedes.

20. Pero si expulso a los demonios con el poder de Dios, eso significa que ha llegado a ustedes el reino de Dios.

21. »Cuando un hombre fuerte y bien armado cuida su hacienda, sus bienes están seguros.

22. Pero si lo ataca otro más fuerte que él y lo vence, le quita las armas en que confiaba y reparte el botín.

23. »El que no está de mi parte, está contra mí; y el que conmigo no recoge, esparce.

24. »Cuando un espíritu maligno sale de una persona, va por lugares áridos buscando un descanso. Y al no encontrarlo, dice: “Volveré a mi casa, de donde salí.”

25. Cuando llega, la encuentra barrida y arreglada.

26. Luego va y trae otros siete espíritus más malvados que él, y entran a vivir allí. Así que el estado final de aquella persona resulta peor que el inicial.»

Leer capítulo completo Lucas 11