15. Entonces Josué hizo con ellos un tratado de ayuda mutua y se comprometió a perdonarles la vida. Y los jefes israelitas ratificaron el tratado.
16. Tres días después de haber concluido el tratado con los gabaonitas, los israelitas se enteraron de que eran sus vecinos y vivían en las cercanías.
17. Por eso se pusieron en marcha, y al tercer día llegaron a sus ciudades: Gabaón, Cafira, Berot y Quiriat Yearín.
18. Pero los israelitas no los atacaron porque los jefes de la comunidad les habían jurado en nombre del Señor, Dios de Israel, perdonarles la vida. Y aunque toda la comunidad se quejó contra sus jefes,
19. éstos contestaron:—Hemos hecho un juramento en nombre del Señor, y no podemos hacerles ningún daño.
20. Esto es lo que haremos con ellos: les perdonaremos la vida, para que no caiga sobre nosotros el castigo divino por quebrantar el juramento que hicimos.
21. Luego añadieron:—Se les permitirá vivir, pero a cambio de ser los leñadores y aguateros de la comunidad.De ese modo, los jefes de la comunidad cumplieron su promesa.
22. Entonces Josué llamó a los gabaonitas y les reclamó:—¿Por qué nos engañaron con el cuento de que eran de tierras lejanas, cuando en verdad son nuestros vecinos?
23. A partir de ahora, ésta será su maldición: serán por siempre sirvientes del templo de mi Dios, responsables de cortar la leña y de acarrear el agua.
24. Los gabaonitas contestaron:—Nosotros, servidores suyos, fuimos bien informados de que el Señor su Dios ordenó a su siervo Moisés que les diera toda esta tierra y que destruyera a todos sus habitantes. Temimos tanto por nuestra vida que decidimos hacer lo que ya saben.
25. Estamos a merced de ustedes. Hagan con nosotros lo que les parezca justo y bueno.
26. Así salvó Josué a los gabaonitas de morir a manos del pueblo de Israel.
27. Ese mismo día Josué los hizo leñadores y aguateros de la asamblea israelita, especialmente del altar del Señor que está en el lugar que él mismo eligió. Y así han permanecido hasta el día de hoy.