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Ezequiel 1:1-12 Nueva Versión Internacional (NVI)

1. En el día quinto del mes cuarto del año treinta, mientras me encontraba entre los deportados a orillas del río Quebar, los cielos se abrieron y recibí visiones de Dios.

2. Habían pasado cinco años y cinco meses desde que el rey Joaquín fue deportado.

3. (En este tiempo, mientras Ezequiel hijo de Buzí estaba a orillas del río Quebar, en la tierra de los caldeos, el Señor le dirigió la palabra, y su mano se posó sobre él.)

4. De pronto me fijé y vi que del norte venían un viento huracanado y una nube inmensa rodeada de un fuego fulgurante y de un gran resplandor. En medio del fuego se veía algo semejante a un metal refulgente.

5. También en medio del fuego vi algo parecido a cuatro seres vivientes,

6. cada uno de los cuales tenía cuatro caras y cuatro alas.

7. Sus piernas eran rectas, y sus pies parecían pezuñas de ternero y brillaban como el bronce bruñido.

8. En sus cuatro costados, debajo de las alas, tenían manos humanas. Estos cuatro seres tenían caras y alas,

9. y las alas se tocaban entre sí. Cuando avanzaban no se volvían, sino que cada uno caminaba de frente.

10. Sus rostros tenían el siguiente aspecto: de frente, los cuatro tenían rostro humano; a la derecha tenían cara de león; a la izquierda, de toro; y por detrás, de águila.

11. Tales eran sus caras. Sus alas se desplegaban hacia arriba. Con dos alas se tocaban entre sí, mientras que con las otras dos se cubrían el cuerpo.

12. Los cuatro seres avanzaban de frente. Iban adonde el espíritu los impulsaba, y no se volvían al andar.

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