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Deuteronomio 32:39-52 Nueva Versión Internacional (NVI)

39. »”¡Vean ahora que yo soy único!No hay otro Dios fuera de mí.Yo doy la muerte y devuelvo la vida,causo heridas y doy sanidad.Nadie puede librarse de mi poder.

40. Levanto la mano al cielo y declaro:Tan seguro como que vivo para siempre,

41. cuando afile mi espada relucientey en el día del juicio la tome en mis manos,me vengaré de mis adversarios;¡les daré su merecido a los que me odian!

42. Mis flechas se embriagarán de sangre,y mi espada se hartará de carne:sangre de heridos y de cautivos,cabezas de caudillos enemigos.”

43. »Alégrense, naciones, con el pueblo de Dios;él vengará la sangre de sus siervos.¡Sí! Dios se vengará de sus enemigos,y hará expiación por su tierra y por su pueblo.»

44. Acompañado de Josué hijo de Nun, Moisés fue y recitó ante el pueblo todas las palabras de este cántico.

45. Cuando terminó, les dijo a todos los israelitas:

46. «Mediten bien en todo lo que les he declarado solemnemente este día, y díganles a sus hijos que obedezcan fielmente todas las palabras de esta ley.

47. Porque no son palabras vanas para ustedes, sino que de ellas depende su vida; por ellas vivirán mucho tiempo en el territorio que van a poseer al otro lado del Jordán.»

48. Ese mismo día el Señor le dijo a Moisés:

49. «Sube a las montañas de Abarín, y contempla desde allí el monte Nebo, en el territorio de Moab, frente a Jericó, y el territorio de Canaán, el cual voy a dar en posesión a los israelitas.

50. En el monte al que vas a subir morirás, y te reunirás con los tuyos, así como tu hermano Aarón murió y se reunió con sus antepasados en el monte Hor.

51. Esto será así porque, a la vista de todos los israelitas, ustedes dos me fueron infieles en las aguas de Meribá Cades; en el desierto de Zin no honraron mi santidad.

52. Por eso no entrarás en el territorio que voy a darle al pueblo de Israel; solamente podrás verlo de lejos.»

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