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Deuteronomio 2:5-16 Nueva Versión Internacional (NVI)

5. no peleen con ellos, porque no les daré a ustedes ninguna porción de su territorio, ni siquiera el lugar donde ustedes planten el pie. A Esaú le he dado por herencia la región montañosa de Seír.

6. Páguenles todo el alimento y el agua que ustedes consuman.’”

7. »Bien saben que el Señor su Dios los ha bendecido en todo lo que han emprendido, y los ha cuidado por todo este inmenso desierto. Durante estos cuarenta años, el Señor su Dios ha estado con ustedes y no les ha faltado nada.

8. »Así que bordeamos el territorio de nuestros hermanos, los descendientes de Esaú, que viven en Seír. Seguimos la ruta del Arabá, que viene desde Elat y Ezión Guéber. Luego dimos vuelta y viajamos por la ruta del desierto de Moab.

9. »El Señor también me dijo: “No ataquen a los moabitas, ni los provoquen a la guerra, porque no les daré a ustedes ninguna porción de su territorio. A los descendientes de Lot les he dado por herencia la región de Ar.”»

10. Tiempo atrás vivió allí un pueblo fuerte y numeroso, el de los emitas, que eran tan altos como los anaquitas.

11. Tanto a ellos como a los anaquitas se les consideraba gigantes, pero los moabitas los llamaban emitas.

12. Antiguamente los horeos vivieron en Seír, pero los descendientes de Esaú los desalojaron, los destruyeron y se establecieron en su lugar, tal como lo hará Israel en la tierra que el Señor le va a dar en posesión.

13. «El Señor ordenó: “¡En marcha! ¡Crucen el arroyo Zéred!” Y así lo hicimos.

14. Habían pasado treinta y ocho años desde que salimos de Cades Barnea hasta que cruzamos el arroyo Zéred. Para entonces ya había desaparecido del campamento toda la generación de guerreros, tal como el Señor lo había jurado.

15. El Señor atacó el campamento hasta que los eliminó por completo.

16. »Cuando ya no quedaba entre el pueblo ninguno de aquellos guerreros,

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