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2 Samuel 18:26-33 Nueva Versión Internacional (NVI)

26. el centinela se dio cuenta de que otro hombre corría detrás de él, así que le anunció al guarda de la puerta:—¡Por ahí viene otro hombre corriendo solo!—Ése también debe de traer buenas noticias —dijo el rey.

27. El centinela añadió:—Me parece que el primero corre como Ajimaz hijo de Sadoc.—Es un buen hombre —comentó el rey—; seguro que trae buenas noticias.

28. Ajimaz llegó y saludó al rey postrándose rostro en tierra, y le dijo:—¡Bendito sea el Señor, Dios de Su Majestad, pues nos ha entregado a los que se habían rebelado en contra suya!

29. —¿Y está bien el joven Absalón? —preguntó el rey.Ajimaz respondió:—En el momento en que tu siervo Joab me enviaba, vi que se armó un gran alboroto, pero no pude saber lo que pasaba.

30. —Pasa y quédate ahí —le dijo el rey.Ajimaz se hizo a un lado.

31. Entonces llegó el cusita y anunció:—Le traigo buenas noticias a Su Majestad. El Señor lo ha librado hoy de todos los que se habían rebelado en contra suya.

32. —¿Y está bien el joven Absalón? —preguntó el rey.El cusita contestó:—¡Que sufran como ese joven los enemigos de Su Majestad, y todos los que intentan hacerle mal!

33. Al oír esto, el rey se estremeció; y mientras subía al cuarto que está encima de la puerta, lloraba y decía: «¡Ay, Absalón, hijo mío! ¡Hijo mío, Absalón, hijo mío! ¡Ojalá hubiera muerto yo en tu lugar! ¡Ay, Absalón, hijo mío, hijo mío!»

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