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2 Reyes 23:16-26 Nueva Versión Internacional (NVI)

16. De regreso, al ver los sepulcros que había en la colina, Josías mandó que recogieran los huesos y los quemaran en el altar para profanarlo, cumpliendo así la palabra del Señor que el hombre de Dios había comunicado cuando anunció estas cosas.

17. Luego el rey preguntó:—¿De quién es ese monumento que veo allá?Y los habitantes de la ciudad le contestaron:—Es el sepulcro del hombre de Dios que vino desde Judá, y que pronunció contra el altar de Betel lo que Su Majestad acaba de hacer.

18. —Déjenlo, pues —replicó el rey—; que nadie mueva sus huesos.Fue así como se conservaron sus huesos junto con los del profeta que había venido de Samaria.

19. Tal como lo hizo en Betel, Josías eliminó todos los santuarios paganos que los reyes de Israel habían construido en las ciudades de Samaria, con los que provocaron la ira del Señor.

20. Finalmente, mató sobre los altares a todos los sacerdotes de aquellos santuarios, y encima de ellos quemó huesos humanos. Entonces regresó a Jerusalén.

21. Después el rey dio esta orden al pueblo:—Celebren la Pascua del Señor su Dios, según está escrito en este libro del pacto.

22. Desde la época de los jueces que gobernaron a Israel hasta la de los reyes de Israel y de Judá, no se había celebrado una Pascua semejante.

23. Pero en el año dieciocho del reinado del rey Josías, esta Pascua se celebró en Jerusalén en honor del Señor.

24. Además, Josías expulsó a los adivinos y a los hechiceros, y eliminó toda clase de ídolos y el resto de las cosas detestables que se veían en el país de Judá y en Jerusalén. Lo hizo así para cumplir las instrucciones de la ley, escritas en el libro que el sacerdote Jilquías encontró en el templo del Señor.

25. Ni antes ni después de Josías hubo otro rey que, como él, se volviera al Señor de todo corazón, con toda el alma y con todas sus fuerzas, siguiendo en todo la ley de Moisés.

26. A pesar de eso, el Señor no apagó el gran fuego de su ira, que ardía contra Judá por todas las afrentas con que Manasés lo había provocado.

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