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2 Crónicas 24:8-16 Nueva Versión Internacional (NVI)

8. Por eso el rey ordenó que se hiciera un cofre y se colocara afuera, junto a la puerta del templo del Señor.

9. Luego mandó que se pregonara por Judá y Jerusalén que trajeran al Señor la contribución que Moisés, siervo del Señor, había ordenado a Israel en el desierto.

10. Todos los jefes y todo el pueblo llevaron alegremente sus contribuciones, y las depositaron en el cofre hasta llenarlo.

11. Los levitas llevaban el cofre a los funcionarios del rey, para que lo examinaran. Cuando veían que había mucho dinero, se presentaban el secretario real y un oficial nombrado por el sumo sacerdote y, luego de vaciar el cofre, volvían a colocarlo en su lugar. Esto lo hacían todos los días, y así recogieron mucho dinero.

12. El rey y Joyadá entregaban el dinero a los que supervisaban la restauración del templo del Señor, y éstos contrataban canteros, carpinteros, y expertos en el manejo del hierro y del bronce, para repararlo.

13. Los supervisores de la restauración trabajaron diligentemente hasta terminar la obra. Repararon el templo del Señor y lo dejaron en buen estado y conforme al diseño original.

14. Cuando terminaron, le llevaron al rey y a Joyadá el dinero que sobró, y éstos lo utilizaron para hacer utensilios para el templo del Señor: utensilios para el culto y para los holocaustos, y cucharones y vasos de oro y de plata.Todos los días, mientras Joyadá vivió, se ofrecieron holocaustos en el templo del Señor.

15. Pero Joyadá envejeció, y murió muy anciano. Cuando murió, tenía ciento treinta años.

16. Fue sepultado junto con los reyes en la Ciudad de David, porque había servido bien a Israel y a Dios y su templo.

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