11. Roboán nombró gobernantes, reforzó las fortificaciones, almacenó en ellas víveres, aceite y vino,
12. y las armó a todas con escudos y lanzas. Así fortificó completamente todas las ciudades y quedó en posesión de Judá y de Benjamín.
13. De todas las regiones de Israel llegaron sacerdotes y levitas para unirse a Roboán.
14. Los levitas abandonaron sus campos de pastoreo y demás posesiones para irse a Judá y a Jerusalén, ya que Jeroboán y sus hijos les habían impedido ejercer el sacerdocio del Señor.