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1 Samuel 2:23-29 Nueva Versión Internacional (NVI)

23. Les dijo: «¿Por qué se comportan así? Todo el pueblo me habla de su mala conducta.

24. No, hijos míos; no es nada bueno lo que se comenta en el pueblo del Señor.

25. Si alguien peca contra otra persona, Dios le servirá de árbitro; pero si peca contra el Señor, ¿quién podrá interceder por él?» No obstante, ellos no le hicieron caso a la advertencia de su padre, pues la voluntad del Señor era quitarles la vida.

26. Por su parte, el niño Samuel seguía creciendo y ganándose el aprecio del Señor y de la gente.

27. Un hombre de Dios fue a ver a Elí, y le dijo:«Así dice el Señor: “Bien sabes que yo me manifesté a tus antepasados cuando estaban en Egipto bajo el poder del faraón.

28. De entre todas las tribus de Israel, escogí a Aarón para que fuera mi sacerdote, es decir, para que en mi presencia se acercara a mi altar, quemara el incienso y se pusiera el efod. Además, a su familia le concedí las ofrendas que los israelitas queman en mi honor.

29. ¿Por qué, pues, tratan ustedes con tanto desprecio los sacrificios y ofrendas que yo he ordenado que me traigan? ¿Por qué honras a tus hijos más que a mí, y los engordas con lo mejor de todas las ofrendas de mi pueblo Israel?”

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