Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Reyes 8:11-18 Nueva Versión Internacional (NVI)

11. Y por causa de la nube, los sacerdotes no pudieron celebrar el culto, pues la gloria del Señor había llenado el templo.

12. Entonces Salomón declaró:«Señor, tú has dicho que habitarías en la oscuridad de una nube,

13. y yo te he construido un excelso templo, un lugar donde habites para siempre.»

14. Luego se puso de frente para bendecir a toda la asamblea de Israel que estaba allí de pie,

15. y dijo:«Bendito sea el Señor, Dios de Israel, que con su mano ha cumplido ahora lo que con su boca le había prometido a mi padre David cuando le dijo:

16. “Desde el día en que saqué de Egipto a mi pueblo Israel, no elegí ninguna ciudad de las tribus de Israel para que en ella se me construyera un templo donde yo habitara, sino que elegí a David para que gobernara a mi pueblo Israel.”

17. »Pues bien, mi padre David tuvo mucho interés en construir un templo en honor del Señor, Dios de Israel,

18. pero el Señor le dijo: “Me agrada que te hayas interesado en construir un templo en mi honor.

Leer capítulo completo 1 Reyes 8