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Mateo 14:21-35 Nueva Traducción Viviente (NTV)

21. Aquel día, ¡unos cinco mil hombres se alimentaron, además de las mujeres y los niños!

22. Inmediatamente después, Jesús insistió en que los discípulos regresaran a la barca y cruzaran al otro lado del lago mientras él enviaba a la gente a casa.

23. Después de despedir a la gente, subió a las colinas para orar a solas. Mientras estaba allí solo, cayó la noche.

24. Mientras tanto, los discípulos se encontraban en problemas lejos de tierra firme, ya que se había levantado un fuerte viento y luchaban contra grandes olas.

25. A eso de las tres de la madrugada, Jesús se acercó a ellos caminando sobre el agua.

26. Cuando los discípulos lo vieron caminar sobre el agua, quedaron aterrados. Llenos de miedo, clamaron: «¡Es un fantasma!».

27. Pero Jesús les habló de inmediato: —No tengan miedo —dijo—. ¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí!

28. Entonces Pedro lo llamó:—Señor, si realmente eres tú, ordéname que vaya hacia ti caminando sobre el agua.

29. —Sí, ven —dijo Jesús.Entonces Pedro se bajó por el costado de la barca y caminó sobre el agua hacia Jesús,

30. pero cuando vio el fuerte viento y las olas, se aterrorizó y comenzó a hundirse.—¡Sálvame, Señor! —gritó.

31. De inmediato, Jesús extendió la mano y lo agarró. —Tienes tan poca fe —le dijo Jesús—. ¿Por qué dudaste de mí?

32. Cuando subieron de nuevo a la barca, el viento se detuvo.

33. Entonces los discípulos lo adoraron. «¡De verdad eres el Hijo de Dios!», exclamaron.

34. Después de cruzar el lago, arribaron a Genesaret.

35. Cuando la gente reconoció a Jesús, la noticia de su llegada corrió rápidamente por toda la región, y pronto la gente llevó a todos los enfermos para que fueran sanados.

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