55. Y se burlaban: «No es más que el hijo del carpintero, y conocemos a María, su madre, y a sus hermanos: Santiago, José, Simón y Judas.
56. Todas sus hermanas viven aquí mismo entre nosotros. ¿Dónde aprendió todas esas cosas?».
57. Se sentían profundamente ofendidos y se negaron a creer en él.Entonces Jesús les dijo: «Un profeta recibe honra en todas partes menos en su propio pueblo y entre su propia familia».
58. Por lo tanto, hizo sólo unos pocos milagros allí debido a la incredulidad de ellos.