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Marcos 7:3-18 Nueva Traducción Viviente (NTV)

3. (Los judíos, sobre todo los fariseos, no comen si antes no han derramado agua sobre el hueco de sus manos, como exigen sus tradiciones antiguas.

4. Tampoco comen nada del mercado sin antes sumergir sus manos en agua. Esa es solo una de las tantas tradiciones a las que se han aferrado, tal como el lavado ceremonial de vasos, jarras y vasijas de metal).

5. Entonces los fariseos y maestros de la ley religiosa le preguntaron:—¿Por qué tus discípulos no siguen nuestra antigua tradición? Ellos comen sin antes realizar la ceremonia de lavarse las manos.

6. Jesús contestó:—¡Hipócritas! Isaías tenía razón cuando profetizó acerca de ustedes, porque escribió:“Este pueblo me honra con sus labios,pero su corazón está lejos de mí.

7. Su adoración es una farsaporque enseñan ideas humanas como si fueran mandatos de Dios”.

8. »Pues ustedes pasan por alto la ley de Dios y la reemplazan con su propia tradición.

9. Entonces dijo:—Ustedes esquivan hábilmente la ley de Dios para aferrarse a su propia tradición.

10. Por ejemplo, Moisés les dio la siguiente ley de Dios: “Honra a tu padre y a tu madre” y “Cualquiera que hable irrespetuosamente de su padre o de su madre tendrá que morir”.

11. Sin embargo, ustedes dicen que está bien que uno le diga a sus padres: “Lo siento, no puedo ayudarlos porque he jurado darle a Dios lo que les hubiera dado a ustedes”.

12. De esta manera, ustedes permiten que la gente desatienda a sus padres necesitados.

13. Y entonces anulan la palabra de Dios para transmitir su propia tradición. Y este es solo un ejemplo entre muchos otros.

14. Luego Jesús llamó a la multitud para que se acercara y oyera. «Escuchen, todos ustedes, y traten de entender.

15. Lo que entra en el cuerpo no es lo que los contamina; ustedes se contaminan por lo que sale de su corazón».

17. Luego Jesús entró en una casa para alejarse de la multitud, y sus discípulos le preguntaron qué quiso decir con la parábola que acababa de emplear.

18. «¿Ustedes tampoco entienden? —preguntó—. ¿No se dan cuenta de que la comida que introducen en su cuerpo no puede contaminarlos?

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