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Marcos 10:11-25 Nueva Traducción Viviente (NTV)

11. Él les dijo: «El que se divorcia de su esposa y se casa con otra comete adulterio contra ella;

12. y si una mujer se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio».

13. Cierto día, algunos padres llevaron a sus niños a Jesús para que los tocara y los bendijera, pero los discípulos regañaron a los padres por molestarlo.

14. Cuando Jesús vio lo que sucedía, se enojó con sus discípulos y les dijo: «Dejen que los niños vengan a mí. ¡No los detengan! Pues el reino de Dios pertenece a los que son como estos niños.

15. Les digo la verdad, el que no reciba el reino de Dios como un niño nunca entrará en él».

16. Entonces tomó a los niños en sus brazos y después de poner sus manos sobre la cabeza de ellos, los bendijo.

17. Cuando Jesús estaba por emprender su camino a Jerusalén, un hombre se le acercó corriendo, se arrodilló y le preguntó:—Maestro bueno, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?

18. —¿Por qué me llamas bueno? —preguntó Jesús—. Solo Dios es verdaderamente bueno;

19. pero para contestar a tu pregunta, tú conoces los mandamientos: «No asesines; no cometas adulterio; no robes; no des falso testimonio; no estafes a nadie; honra a tu padre y a tu madre».

20. —Maestro —respondió el hombre—, he obedecido todos esos mandamientos desde que era joven.

21. Jesús miró al hombre y sintió profundo amor por él.—Hay una cosa que todavía no has hecho —le dijo—. Anda y vende todas tus posesiones y entrega el dinero a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Después ven y sígueme.

22. Al oír esto, el hombre puso cara larga y se fue triste porque tenía muchas posesiones.

23. Jesús miró a su alrededor y dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!».

24. Los discípulos quedaron asombrados de sus palabras. Pero Jesús volvió a decir: «Queridos hijos, es muy difícil entrar en el reino de Dios.

25. De hecho, ¡es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios!».

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