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Zacarías 8:13-23 Nueva Traducción Viviente (NTV)

13. Entre las demás naciones, Judá e Israel se convirtieron en símbolo de una nación maldita. ¡Pues ya no lo serán más! Ahora los rescataré y los haré símbolo y fuente de bendición. Así que no tengan miedo. ¡Sean fuertes y sigan con la reconstrucción del templo!

14. »Pues el Señor de los Ejércitos Celestiales dice: estaba decidido a castigarlos cuando sus antepasados me hicieron enojar y no cambié de parecer, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.

15. Sin embargo, ahora estoy decidido a bendecir a Jerusalén y al pueblo de Judá, así que no tengan miedo.

16. Pero ustedes deben hacer lo siguiente: digan la verdad unos a otros. En sus tribunales, pronuncien veredictos que sean justos y que conduzcan a la paz.

17. No tramen el mal unos contra otros. Dejen de amar el decir mentiras y jurar que son verdad. Yo odio todas esas cosas, dice el Señor».

18. Este es otro mensaje que me dio el Señor de los Ejércitos Celestiales:

19. «El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: los ayunos tradicionales y los tiempos de luto que han mantenido al principio del verano, en pleno verano, en el otoño y en el invierno ahora han terminado. Se convertirán en festivales de alegría y celebración para el pueblo de Judá. Así que amen la verdad y la paz.

20. »El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: gente de naciones y ciudades en todo el mundo viajará a Jerusalén.

21. La gente de una ciudad dirá a la gente de otra: “Vengan con nosotros a Jerusalén para pedir que el Señor nos bendiga. Adoremos al Señor de los Ejércitos Celestiales. Yo estoy decidido a ir”.

22. Muchos pueblos y naciones poderosas irán a Jerusalén a buscar al Señor de los Ejércitos Celestiales y a pedir su bendición.

23. »El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: en aquellos días, diez hombres de naciones e idiomas diferentes agarrarán por la manga a un judío y le dirán: “Por favor, permítenos acompañarte, porque hemos oído que Dios está contigo”».

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