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Jeremías 35:1-9 Nueva Traducción Viviente (NTV)

1. Este es el mensaje que el Señor le dio a Jeremías cuando Joacim, hijo de Josías, era rey de Judá:

2. «Ve al asentamiento donde habitan las familias de los recabitas e invítalos al templo del Señor. Llévalos a una de las habitaciones interiores y ofréceles algo de vino».

3. Así que fui a ver a Jaazanías, hijo de Jeremías y nieto de Habasinías, y a todos sus hermanos e hijos, que representan a todas las familias recabitas.

4. Los llevé al templo y fuimos a la habitación asignada a los hijos de Hanán, hijo de Igdalías, hombre de Dios. Esta habitación se encontraba junto a la que usaban los funcionarios del templo, encima de la habitación de Maaseías, hijo de Salum, el portero del templo.

5. Puse copas y jarras llenas de vino delante de ellos y los invité a beber,

6. pero no aceptaron. «No —dijeron—, no bebemos vino porque nuestro antepasado Jonadab, hijo de Recab, nos ordenó: “Nunca beban vino ni ustedes ni sus descendientes.

7. Tampoco edifiquen casas, ni planten cultivos, ni viñedos, sino que siempre vivan en carpas. Si ustedes obedecen estos mandamientos vivirán largas y buenas vidas en la tierra”.

8. Así que le hemos obedecido en todas estas cosas. Nunca hemos bebido vino hasta el día de hoy, ni tampoco nuestras esposas, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas.

9. No hemos construido casas ni hemos sido dueños de viñedos o granjas, ni sembramos campos.

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