42. »Estas ofrendas quemadas deberás presentarlas cada día, de generación en generación. Ofrécelas en presencia del Señor, a la entrada del tabernáculo; allí me encontraré contigo y te hablaré.
43. Me reuniré allí con el pueblo de Israel, en el lugar que se hace sagrado por mi gloriosa presencia.
44. Así es, consagraré el tabernáculo y el altar, y consagraré a Aarón y a sus hijos para que me sirvan como sacerdotes.
45. Entonces viviré en medio de los israelitas y seré su Dios,
46. y ellos sabrán que yo soy el Señor su Dios. Yo soy quien los sacó de la tierra de Egipto para vivir entre ellos. Yo soy el Señor su Dios.