38. ¿Dónde están ahora los diosesque comían la gordura de sus sacrificiosy bebían el vino de sus ofrendas?¡Que se levanten esos dioses y los ayuden!¡Que ellos les den refugio!
39. ¡Miren ahora, yo mismo soy Dios!¡No hay otro dios aparte de mí!Yo soy el que mata y el que da vida,soy el que hiere y el que sana.¡Nadie puede ser librado de mi mano poderosa!
40. Ahora levanto mi mano al cieloy declaro: ‘Tan cierto como que yo vivo,
41. cuando afile mi espada relucientey comience a hacer justicia,me vengaré de mis enemigosy daré su merecido a los que me rechazan.
42. Haré que mis flechas se emborrachen de sangre,y mi espada devorará carne:la sangre de los masacrados y cautivos,y las cabezas de los jefes enemigos’”.