30. —Désela toda a él —dijo Mefiboset—. ¡Estoy satisfecho con que haya vuelto a salvo, mi señor el rey!
31. Barzilai de Galaad había descendido de Rogelim para escoltar al rey a cruzar el Jordán.
32. Él era muy anciano, tenía unos ochenta años, y era muy rico. Él fue quien proveyó el alimento para el rey durante el tiempo que pasó en Mahanaim.
33. —Cruza el río conmigo y quédate a vivir en Jerusalén —le dijo el rey a Barzilai—. Y allí me haré cargo de ti.
34. —No —le respondió—, soy demasiado viejo para ir con el rey a Jerusalén.