Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Reyes 9:20-26 Nueva Traducción Viviente (NTV)

20. El centinela exclamó: «¡El mensajero llegó hasta ellos, pero tampoco regresa! Debe ser Jehú, el hijo de Nimsi, porque conduce como un loco».

21. «¡Rápido! ¡Preparen mi carro!», ordenó el rey Joram.Entonces el rey Joram de Israel y el rey Ocozías de Judá salieron en sus carros de guerra a encontrarse con Jehú. Dieron con él en la parcela que había pertenecido a Nabot de Jezreel.

22. El rey Joram preguntó:—¿Vienes en son de paz, Jehú?—¿Cómo puede haber paz cuando la idolatría y la brujería de tu madre, Jezabel, están por todas partes? —contestó Jehú.

23. Entonces el rey Joram, dando vuelta a sus caballos para huir, le gritó a Ocozías: «¡Traición, Ocozías!».

24. Jehú tensó su arco y le disparó a Joram entre los hombros. La flecha le atravesó el corazón, y Joram cayó muerto dentro de su carro.

25. Luego Jehú le dijo a su oficial, Bidcar: «Arrójenlo en la parcela que perteneció a Nabot de Jezreel. ¿Recuerdas cuando tú y yo íbamos a caballo detrás de su padre, Acab? El Señor declaró este mensaje en su contra cuando dijo:

26. “Juro solemnemente, dice el Señor, que en esta misma parcela le daré su merecido por el asesinato que vi ayer de Nabot y de sus hijos”. Así que tírenlo en la propiedad de Nabot, tal como dijo el Señor».

Leer capítulo completo 2 Reyes 9