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2 Reyes 8:1-12 Nueva Traducción Viviente (NTV)

1. Eliseo le había dicho a la madre del niño que él había resucitado: «Toma a tu familia y múdate a algún otro lugar, porque el Señor ha decretado que habrá hambre en Israel durante siete años».

2. Entonces la mujer hizo lo que el hombre de Dios le indicó. Tomó a su familia y se estableció en la tierra de los filisteos por siete años.

3. Una vez que pasó el hambre, la mujer regresó de la tierra de los filisteos y fue a ver al rey para recuperar su casa y sus tierras.

4. Cuando ella entró, el rey estaba conversando con Giezi, el sirviente del hombre de Dios, y acababa de decirle: «Cuéntame algunas de las grandes cosas que ha hecho Eliseo».

5. Cuando Giezi estaba relatándole al rey la ocasión en que Eliseo le había devuelto la vida a un niño, en ese preciso instante, la madre del niño entró para presentarle al rey la petición de su casa y de sus tierras.—¡Mire, mi señor el rey! —exclamó Giezi—. ¡Ella es la mujer y este es su hijo, el que Eliseo volvió a la vida!

6. —¿Es cierto? —le preguntó el rey.Y ella le contó la historia. Entonces el rey dio instrucciones a uno de sus funcionarios para que la mujer recuperara todo lo que había perdido, incluso el valor de todos los cultivos que se habían cosechado durante su ausencia.

7. Luego Eliseo fue a Damasco, la capital de Aram, donde el rey Ben-adad estaba enfermo. Cuando alguien le informó al rey que el hombre de Dios había llegado,

8. el rey le dijo a Hazael: «Llévale un regalo al hombre de Dios. Luego dile que le pregunte al Señor: “¿Voy a recuperarme de esta enfermedad?”».

9. Entonces Hazael cargó cuarenta camellos con los mejores productos de Damasco para regalarle a Eliseo. Fue a verlo y le dijo:—Tu siervo Ben-adad, rey de Aram, me ha enviado a preguntarte: “¿Voy a recuperarme de esta enfermedad?”.

10. Eliseo contestó:—Ve y dile: “Ciertamente te recuperarás”. ¡Pero la verdad es que el Señor me ha mostrado que morirá!

11. Eliseo se quedó mirando a Hazael tan fijamente que Hazael se sintió incómodo. Así que el hombre de Dios se puso a llorar.

12. —¿Qué pasa, mi señor? —le preguntó Hazael.—Yo sé las cosas terribles que tú le harás al pueblo de Israel —contestó Eliseo—. ¡Quemarás sus ciudades fortificadas, matarás a sus muchachos a filo de espada, estrellarás a sus niños contra el suelo y abrirás el vientre a sus mujeres embarazadas!

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