5. Un peñasco estaba al norte, frente a Micmas; el otro estaba al sur, delante de Geba.
6. —Crucemos hasta la avanzada de esos paganos —le dijo Jonatán a su escudero—. Tal vez el Señor nos ayude, porque nada puede detener al Señor. ¡Él puede ganar la batalla ya sea que tenga muchos guerreros o solo unos cuantos!
7. —Haz lo que mejor te parezca —respondió el escudero—. Estoy contigo, decidas lo que decidas.
8. —Muy bien —le dijo Jonatán—. Cruzaremos y dejaremos que nos vean.
9. Si nos dicen: “Quédense donde están o los mataremos”, entonces nos detendremos y no subiremos hacia ellos.