Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Juan 8:11-22 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

11. "Ninguno, Señor," respondió ella. Entonces Jesús le dijo: "Yo tampoco te condeno. Vete; y desde ahora no peques más."

12. Jesús les habló otra vez, diciendo: "Yo soy la Luz del mundo; el que Me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la Luz de la vida."

13. Entonces los Fariseos Le dijeron: "Tú das testimonio de Ti mismo; Tu testimonio no es verdadero (válido)."

14. Jesús les respondió: "Aunque Yo doy testimonio de Mí mismo, Mi testimonio es verdadero, porque Yo sé de dónde he venido y adónde voy; pero ustedes no saben de dónde vengo ni adónde voy.

15. Ustedes juzgan según la carne; Yo no juzgo a nadie.

16. Pero si Yo juzgo, Mi juicio es verdadero; porque no soy Yo solo, sino Yo y el Padre que Me envió.

17. Aun en la ley de ustedes está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero.

18. Yo soy el que doy testimonio de Mí mismo, y el Padre que Me envió da testimonio de Mí."

19. Entonces Le decían: "¿Dónde está Tu Padre?" "Ustedes no Me conocen a Mí ni a Mi Padre," les respondió Jesús. "Si Me conocieran, conocerían también a Mi Padre."

20. Estas palabras las pronunció en el lugar del tesoro, cuando enseñaba en el templo; y nadie Lo prendió, porque todavía no había llegado Su hora.

21. Entonces Jesús les dijo de nuevo: "Yo me voy, y Me buscarán, y ustedes morirán en su pecado; adonde Yo voy, ustedes no pueden ir."

22. Por eso los Judíos decían: "¿Acaso se va a suicidar, puesto que dice: 'Adonde Yo voy, ustedes no pueden ir'?"

Leer capítulo completo Juan 8