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Hechos 26:8-17 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

8. ¿Por qué se considera increíble entre ustedes que Dios resucite a los muertos?

9. "Yo ciertamente había creído que debía hacer muchos males en contra del nombre de Jesús de Nazaret.

10. Esto es precisamente lo que hice en Jerusalén. No sólo encerré en cárceles a muchos de los santos con la autoridad recibida de los principales sacerdotes, sino que también, cuando eran condenados a muerte, yo añadía mi voto.

11. Castigándolos con frecuencia en todas las sinagogas, procuraba obligarlos a blasfemar, y enfurecido contra ellos, seguía persiguiéndolos aun hasta en las ciudades extranjeras.

12. "Ocupado en esto, cuando iba para Damasco con autoridad y comisión de los principales sacerdotes,

13. al mediodía, oh rey, yendo de camino, vi una luz procedente del cielo más brillante que el sol, que resplandecía alrededor mío y de los que viajaban conmigo.

14. Después de que todos caímos al suelo, oí una voz que me decía en el idioma Hebreo: 'Saulo, Saulo, ¿por qué Me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón.'

15. "Yo entonces dije: '¿Quién eres, Señor?' Y el Señor dijo: 'Yo soy Jesús a quien tú persigues.

16. Pero levántate y ponte en pie; porque te he aparecido con el fin de designarte como ministro y testigo, no sólo de las cosas que has visto, sino también de aquéllas en que Me apareceré a ti.

17. Te rescataré del pueblo Judío y de los Gentiles, a los cuales Yo te envío,

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