Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Hechos 26:16-22 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

16. Pero levántate y ponte en pie; porque te he aparecido con el fin de designarte como ministro y testigo, no sólo de las cosas que has visto, sino también de aquéllas en que Me apareceré a ti.

17. Te rescataré del pueblo Judío y de los Gentiles, a los cuales Yo te envío,

18. para que les abras sus ojos a fin de que se conviertan de las tinieblas a la luz, y del dominio de Satanás a Dios, para que reciban, por la fe en Mí, el perdón de pecados y herencia entre los que han sido santificados.'

19. "Por tanto, oh rey Agripa, no fui desobediente a la visión celestial,

20. sino que anunciaba, primeramente a los que estaban en Damasco y también en Jerusalén, y después por toda la región de Judea, y aun a los Gentiles, que debían arrepentirse y volverse a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento.

21. "Por esta causa, algunos Judíos me prendieron en el templo y trataron de matarme.

22. Así que habiendo recibido ayuda de Dios, continúo hasta este día testificando tanto a pequeños como a grandes, no declarando más que lo que los profetas y Moisés dijeron que sucedería:

Leer capítulo completo Hechos 26