42. Y se dedicaban continuamente a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión, al partimiento del pan y a la oración.
43. Sobrevino temor a toda persona; y muchos prodigios y señales (milagros) se hacían por los apóstoles.
44. Todos los que habían creído estaban juntos y tenían todas las cosas en común;
45. vendían todas sus propiedades y sus bienes y los compartían con todos, según la necesidad de cada uno.
46. Día tras día continuaban unánimes en el templo y partiendo el pan en los hogares, comían juntos con alegría y sencillez de corazón,
47. alabando a Dios y hallando favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día al número de ellos los que iban siendo salvos.