Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Hebreos 12:2-11 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

2. puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de El soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.

3. Consideren, pues, a Aquél que soportó tal hostilidad de los pecadores contra El mismo, para que no se cansen ni se desanimen en su corazón.

4. Porque todavía, en su lucha contra el pecado, ustedes no han resistido hasta el punto de derramar sangre.

5. Además, han olvidado la exhortación que como a hijos se les dirige: "Hijo Mio, no tengas en poco la disciplina del Señor, ni te desanimesal ser reprendido por El.

6. Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo."

7. Es para su corrección (disciplina) que sufren (lo soportan). Dios los trata como a hijos; porque ¿qué hijo hay a quien su padre no discipline?

8. Pero si están sin disciplina, de la cual todos han sido hechos participantes, entonces son hijos ilegítimos y no hijos verdaderos .

9. Además, tuvimos padres terrenales para disciplinarnos, y los respetábamos, ¿con cuánta más razón no estaremos sujetos al Padre de nuestros espíritus, y viviremos?

10. Porque ellos nos disciplinaban por pocos días como les parecía, pero El nos disciplina para nuestro bien, para que participemos de Su santidad.

11. Al presente ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza. Sin embargo, a los que han sido ejercitados (adiestrados) por medio de ella, después les da fruto apacible de justicia.

Leer capítulo completo Hebreos 12