1. Den gracias al Señor, porque El es bueno; Porque para siempre es Su misericordia.
2. Diga ahora Israel: "Para siempre es Su misericordia."
3. Diga ahora la casa de Aarón: "Para siempre es Su misericordia."
4. Digan ahora los que temen (reverencian) al Señor: "Para siempre es Su misericordia."
5. En medio de mi angustia invoqué al Señor; El Señor me respondió y me puso en un lugar espacioso.
6. El Señor está a mi favor; no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?
7. El Señor está por mí entre los que me ayudan; Por tanto, miraré triunfante sobre los que me aborrecen.
8. Es mejor refugiarse en el Señor Que confiar en el hombre.