Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Lamentaciones 3:46-61 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

46. Han abierto su boca contra nosotros Todos nuestros enemigos.

47. Nos han sobrevenido terror y foso, Desolación y destrucción.

48. Arroyos de lágrimas derraman mis ojos A causa de la destrucción de la hija de mi pueblo (Jerusalén).

49. Mis ojos fluyen sin cesar, Ya que no hay descanso

50. Hasta que el Señor mire Y vea desde los cielos.

51. Mis ojos traen dolor a mi alma Por todas las hijas de mi ciudad.

52. Mis enemigos, sin haber causa, Constantemente me han dado caza como a un ave.

53. Silenciaron mi vida en la fosa, Pusieron piedra sobre mí.

54. Cubrieron las aguas mi cabeza, Dije: "¡Estoy perdido!"

55. Invoqué Tu nombre, oh Señor, Desde la fosa más profunda.

56. Tú oíste mi voz: "No escondas Tu oído a mi clamor, a mi grito de auxilio."

57. Te acercaste el día que Te invoqué, Dijiste: "¡No temas!"

58. Tú has defendido, oh Señor, la causa de mi alma, Tú has redimido mi vida.

59. Tú has visto, oh Señor, mi opresión, Juzga mi causa.

60. Has visto toda su venganza, Todas sus tramas contra mí.

61. Has oído sus oprobios, oh Señor, Todas sus tramas contra mí;

Leer capítulo completo Lamentaciones 3