13. El prende a los sabios en su propia astucia, Y el consejo de los sagaces pronto lo frustra.
14. De día tropiezan con las tinieblas, Y a mediodía andan a tientas como de noche.
15. Pero El salva al pobre de la espada en sus bocas, Y de la mano del poderoso.
16. El desamparado, pues, tiene esperanza, Y la injusticia tiene que cerrar su boca.
17. Cuán bienaventurado es el hombre a quien Dios reprende; No desprecies, pues, la disciplina del Todopoderoso (Shaddai).
18. Porque El inflige dolor, pero da alivio; El hiere, pero Sus manos también sanan.
19. De seis aflicciones te librará, Y en la séptima no te tocará el mal.
20. En el hambre, El te salvará de la muerte, Y en la guerra, del poder de la espada.
21. Estarás a cubierto del azote de la lengua, Y no temerás la violencia cuando venga.
22. De la violencia y del hambre te reirás, Y no temerás a las fieras de la tierra.
23. Pues con las piedras del campo harás tu alianza, Y las fieras del campo estarán en paz contigo.
24. Y sabrás que tu tienda está segura, Porque visitarás tu morada y no temerás pérdida alguna.
25. También sabrás que tu descendencia será numerosa, Y tus vástagos como la hierba de la tierra.
26. En pleno vigor llegarás al sepulcro, Como se recogen las gavillas a su tiempo.