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Ezequiel 31:3-14 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

3. Recuerda que Asiria era un cedro en el Líbano De hermosas ramas y frondoso, de sombra abundante Y de elevada altura, Y su copa estaba entre las nubes.

4. Las aguas lo hicieron crecer y las corrientes profundas lo encumbraron; Con sus ríos se extendía alrededor del lugar donde estaba plantado, Y enviaba sus corrientes a todos los árboles del campo.

5. Por eso su altura era mayor que la de todos los árboles del campo. Se multiplicaban sus ramas y se alargaba su ramaje, Extendiéndose a causa de las muchas aguas.

6. En sus ramas anidaban todas las aves del cielo, Bajo su ramaje parían todas las bestias del campo, Y a su sombra habitaban todas las grandes naciones.

7. Era, pues, hermoso en su grandeza, por la extensión de sus ramas; Porque sus raíces estaban junto a muchas aguas.

8. Los cedros no lo igualaban en el huerto de Dios; Los cipreses no se podían comparar con su ramaje, Y los plátanos no igualaban sus ramas. Ningún árbol en el huerto de Dios podía compararse a él en su hermosura.

9. Hermoso lo hice por la multitud de sus ramas, Y lo envidiaban todos los árboles del Edén que estaban en el huerto de Dios.

10. Por tanto, así dice el Señor Dios: "Porque es de elevada altura, y ha puesto su copa entre las nubes, y su corazón es altivo por su altura,

11. lo entregaré, pues, en manos de un déspota de las naciones que lo tratará con dureza. Conforme a su maldad lo he echado fuera.

12. Y extranjeros, los más crueles de entre las naciones, lo han derribado y abandonado. Sus ramas han caído sobre los montes y en todos los valles, y su ramaje ha sido quebrado en todas las barrancas de la tierra. Todos los pueblos de la tierra se han retirado de su sombra y lo han abandonado.

13. Sobre sus ruinas habitarán todas las aves del cielo, y sobre su ramaje derribado estarán todas las bestias del campo,

14. para que no se exalten en su altura ninguno de los árboles junto a las aguas, ni alcen su copa entre las nubes, ni confíen en su altura sus poderosos bien regados. Porque todos han sido entregados a la muerte, a las profundidades de la tierra, entre los hijos de los hombres con los que descienden a la fosa.'"

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